Estamos acostumbrados a llamar a este palacio de Varsovia “El Presidencial”, sin embargo, sólo ha sido sede de los presidentes polacos desde 1994. Este palacio, el más grande de Varsovia, se llamaba también: Palacio Koniecpolski, Palacio Radziwill, Palacio Lubomirski, Palacio Namiestnikowski y Palacio del Consejo de Ministros.
Nobleza polaca
La construcción de este edificio de estilo barroco comenzó por orden del Gran Hetman de la Corona Stanisław Koniecpolski en 1643. Tras su muerte, el palacio pasó de mano en mano de los representantes de la nobleza polaca. Era un lugar de reuniones públicas, fiestas, bailes, representaciones teatrales y ópera. Aquí se celebraron reuniones de la delegación que preparaba el tratado sobre la primera partición de Polonia. Durante la insurrección de Kosciuszko se instaló aquí un hospital militar, y el 24 de febrero de 1818 tuvo lugar el primer concierto público de Frédéric Chopin, que entonces sólo tenía 8 años.
A principios del siglo XIX, el palacio fue comprado por el gobierno del Reino de Polonia y fue reconstruido en estilo clasicista (este estilo prevalece hasta hoy). Sorprendentemente, el palacio sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial prácticamente intacto. Sin embargo, durante este tiempo sufrió la estatua del príncipe Jozef Poniatowski, cuya copia no se colocó delante del edificio hasta 1965. Aquí tuvieron lugar las negociaciones de la Mesa Redonda, tras las cuales Polonia recuperó su independencia democrática.
Es imposible abreviar la historia del Palacio Presidencial: su significado y sus funciones fueron tan importantes para Polonia que sólo podemos remitirte a una lectura más detallada de la historia de este edificio. Aquí tuvieron lugar algunos de los acontecimientos culturales más importantes para la nación. También fue aquí donde Polonia perdió y recuperó su independencia.